Más de una
decena de vidas de pacientes que sufren patologías hepáticas graves ha logrado
salvar la Unidad de Gastroenterología del Hospital Dr. Eduardo Pereira (HEP) de
Valparaíso gracias a la implementación desde el año 2019 de un programa de
derivación de patologías hepáticas al trasplante, el cual ha logrado
consolidarse actualmente como un polo de desarrollo en esta materia en toda la
red asistencial del Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio.
Este programa ha
logrado potenciar diversos aspectos relacionados con la gestión de la
denominada “ruta del paciente candidato a trasplante hepático”, experimentado
un notable avance en pocos años, lo que le ha significado convertirse en un
referente a nivel regional para el tratamiento de estos casos.
El Dr. Alejandro
Ferrada Sánchez, gastroenterólogo a cargo del programa, explicó que en los
últimos años se ha aumentado significativamente el número de pacientes
derivados para trasplante, gestionados en el HEP. “En los últimos tras a cuatro
años, gracias a la gestión de la Unidad de Gastroenterología de nuestro
hospital, se han logrado trasplantar a 10 pacientes, una cifra que representa
un hito en comparación con años anteriores y con la realidad regional. Este
aumento se debe a una mejora sustancial que hemos experimentado con la gestión
clínica de cada uno de los pacientes; la agilización de los trámites y la
consolidación de un equipo especializado en esta materia, el cual tiene la
convicción de que la decisión de derivar a trasplante permite salvarle la vida al
paciente”.
El especialista
recalcó que “para trasplantar a un paciente lo primero tiene que haber es
convicción por esta causa y motivación del médico tratante y del equipo para
derivarlo donde corresponde”.
Explicó que
“antes del 2018 eran muy pocos pacientes de nuestro Servicio de Salud los que
lograban optar a un trasplante; además, durante la pandemia claramente hubo una
disminución, retomándose de mejor forma este tema desde el 2021 y logrando una
derivación más oportuna desde 2024 por cambios en los flujos de derivación.
En Chile existe
un número limitado de centros públicos de trasplantes para derivar pacientes,
como son el Hospital del Salvador de Santiago, el hospital Sótero del Río y el
Hospital Regional Guillermo Grant Benavente de Concepción, por lo cual es muy
difícil para el enfermo acceder y perseverar en solitario en esta ruta, ya que
según señala el facultativo, el sistema siempre está muy saturado.
La Unidad de
Gastroenterología del HEP atiende, entre otros, a pacientes con enfermedades hepáticas
en diferentes etapas y gravedad, además de diversas etiologías como esteatosis
hepática, por uso de alcohol, virales, autoinmune, etc.
En el caso
particular de los pacientes con patologías hepáticas complicadas, el doctor
Ferrada señala que “los atiendo en mi policlínico de trasplante hepático y me
dedico a ellos en un horario especial, controlando a quienes están en
evaluación para trasplante o que ya están trasplantados y necesitan tratamiento
y control permanente”, acotando que la idea es no dejarlos solos en este
proceso y apoyarlos en todas las etapas de la ruta y perseverar en la
derivación oportuna.
Una de las
complicaciones más frecuentes de enfermedades crónicas y no controladas del
hígado es la cirrosis, siendo también la principal causa de derivación al
trasplante. El Dr. Ferrada precisó que “si bien el alcoholismo es un factor de
riesgo conocido en esta enfermedad, no es el único. La esteatosis hepática
asociado a disfunción metabólica (asociado a enfermedades metabólicas como la
diabetes y la obesidad, dislipidemia por ejemplo), se ha convertido en una
causa cada vez más frecuente”.
Agregó que “el
trasplante hepático es la única opción para muchos pacientes con cirrosis
avanzada y descompensada, ya que les permite aumentar significativamente su
esperanza de vida. En tanto, la tasa de mortalidad para los pacientes que no se
trasplantan es alta, pudiendo llegar a
20-25% anual, porque son pacientes que pueden presentar múltiples
complicaciones, dado su fragilidad . La única solución de aumentar la sobrevida
es el trasplante. No hay otra alternativa cuando hay cirrosis avanzada”,
puntualizó el Dr. Ferrada.
CUIDADO DEL
HÍGADO
El Dr. Ferrada
destacó la importancia de la detección temprana de las enfermedades hepáticas y
la necesidad de que las personas se realicen controles médicos periódicos,
especialmente a partir de los 40 años, sobre todo porque muchas enfermedades
del hígado son asintomáticas y cuando se manifiestan, ya se encuentran en
estados avanzados.
Enfatizó que “lo
ideal es no llegar a un trasplante hepático y eso se logra identificando la
enfermedad hepática en forma precoz y oportuna. Si el paciente se encuentra en
la etapa de cirrosis hepática, se debe intentar que la enfermedad no avance,
enfatizándose en el control de la causa de la enfermedad hepática (Alcohol,
Diabetes, obesidad, etc). Y si esta avanzada, lo importante es evaluar si es
candidato a trasplante para gestionar en forma oportuna la evaluación en centro
de trasplante”.
Los exámenes de
sangre, la ecografía y la elastografía hepáticas son fundamentales para evaluar
la salud del hígado, explicó el profesional y eso es lo que justamente ha
reforzado la unidad de Gastroenterología del HEP en la etapa del control de los
pacientes. “La idea es gestionar con prontitud para poder agilizar los procesos
en caso de que se requiera un trasplante hepático y actuar de forma oportuna”,
enfatizó el Dr. Ferrada.
Finalmente,
reiteró que el consumo excesivo de alcohol, la obesidad, la diabetes y la
hepatitis viral son los principales factores de riesgo para desarrollar
enfermedades hepáticas y que para prevenirlas, es fundamental adoptar hábitos
de vida saludables, como mantener una alimentación equilibrada, realizar
ejercicio regularmente, evitar la ingesta excesiva de alcohol y la pesquisa
constante de enfermedad trasmisibles como las hepatitis virales en población de
riesgo.